La contaminación para algunas ciudades es un gran problema, con este metodo los edificios tomarían un papel mas activo en la extracción de los contaminantes del cielo, trabajarian más como una aspiradora.
Desarrollado por Carmen Trudell, profesora asistente en la Escuela de Arquitectura de Cal Poly San Luis Obispo y fundadora de Both Landscape and Architecture.
Este material innovador para la construcción está diseñado para formar parte del sistema de ventilación estándar de un edificio. Tiene un sistema de fachada de dos capas, con ladrillos especiales en el exterior y aislamiento estándar en el interior.
El sistema se compone de dos partes principales: los ladrillos de hormigón y un acoplador de plástico reciclado, que ayuda a alinear los ladrillos y crea una ruta desde el exterior hacia el centro hueco del ladrillo. Los propios ladrillos de hormigón disponen de una superficie facetada que ayuda a dirigir el flujo de aire en el sistema y una cavidad separada para su inserción de la estructura de acero.
Breathe Brick puede funcionar tanto con sistemas de ventilación mecánica y pasiva, ya que el ladrillo simplemente suministra aire filtrado en el pleno de la pared; este aire puede entonces ser entregado al interior del edificio a través de equipo mecánico o a través de los respiraderos impulsados por sistemas pasivos tales como la ventilación pila.
En las pruebas de túnel de viento, el sistema se encontró para filtrar 30% de partículas finas (tales como contaminantes del aire) y 100% de partículas gruesas, tales como polvo. Como todo el sistema es relativamente barato, el Trudell postula la Breathe Brick como una manera de reducir los niveles de contaminación en los países en desarrollo, donde la rápida expansión de la industria y las regulaciones ambientales menos estrictas a menudo causan problemas.
Fuente: archdaily.com